Capítulo VII:
Empezaba
el día, Zedka amaneció con un fuerte dolor de cabeza, tuvo unas pesadillas que
no pudo conseguir el sueño, al parecer se trataba de una emboscada con un
secuestro dado por los hombres de negros --la misma que se llevaban a Iva en
aquella furgoneta--, despertó sudorosa, no tenía ganas de ir a la escuela, se
vistió con un desgano y se marchó al hall para desayunar a lado de su madre, se
preparó y arreglo los cabellos y se dirigió hacia la parada del autobús, se
sentó en la parte final del autobús, y como quien no quiere dormir, en eso que
se tiene un ojo abierto y otro cerrado pestañeando, vio un atraco en las
avenidas cerca a su casa de camino a la escuela, se paró y se dirigió al
final del bus para poder conseguir visualizar bien a las personas; ella tenía la
psicosis que todo se refería a aquellos hombres, su mente estaba casi
predestinada a esa conjetura, pero no era de ese modo al menos no esta vez.
Llegando a la escuela todos se
miraban con un asombro por aceptar ir a la gran fiesta que ofrecía karonka, el
“nerd”; entre los que decían era el chico más atractivo de la
escuela que llevaría consigo a una muchacha, ella era Zedka, ella por
supuesto al escuchar su nombre se quedó perpleja, ya que no tenía ninguna
intención de querer conocer a ese muchacho y menos ser el centro de atención de
la fiesta, de todas maneras lo rechazaría si llegara a proponérselo. Camino al final del pasillo y
se metió a su salón a escuchar lo nuevo del profesor de historia.

En su cuaderno de apuntes, Zedka
recordaba todo lo escrito, y trataba de armar un rompecabezas con las piezas
claves que tenía en él; pareciera que se tratara de una organización no
soviética y menos de la policía del país helvético, formulaba una libre transición
de una furgoneta a lado de la policía o en complicidad con ellos, pero
terminaba por borrar esa teoría de su mente. Continúo haciendo círculos en una
hoja mientras su cabeza reposaba en su mano izquierda mirando al profesor
hablar.
Sonó el timbre del término de la
clase y se dirigió a la biblioteca para buscar libros policiales o
criminológicos, pero solo se los daban a los profesores como método de teorías
conspirativas jamás podría alcanzar a coger uno para echar una ojeada.
Desilusionada se marchó a deambular por el patio, viendo de lejos al chico
atractivo para muchas menos para ella que se acercaba a su persona, se paró
quien de forma arrogante para decir de
un solo tirón: quieres ir conmigo a la fiesta del nerd?, ella lo que respondió
determinadamente un NO, contundente, se vio herido por su reacción el ego que
no le dejaba que nadie pueda rechazarlo y atino por solo acomodarle el cabello detrás de la oreja y
darle un beso en la mejilla provocadoramente e irse.
Zedka en sus adentros solo se rió
de una forma burlona –era segura decidida y con mucha independencia, diferente
a su amiga que era más emocional y muy crédula--, cogió la mochila y se marchó
a su segunda clase del día.
Daban las 12 y media de la tarde,
cuando al salir de la escuela en la puerta se encuentra con la madre de Iva,
saludándola de forma extraña –pensaba que venía por ella--, se marchó a paso
lento y sin mirar hacia atrás por una cuadra, luego determino que voltearía para
saber qué hacía, fue donde encontró a karonka hablando con ella, lo saco hacia
un lado y atino a observar cada milímetro de sus reacciones de ambos, vio que
se despedía del chico y se marchó la seora Veronka, con unas manos temblorosas
o de forma inquieta de no encontrar a respuesta que fue a buscar con el nerd.
Preguntándose qué hacía con él o que fue a preguntarle, volteo y siguió
caminando.
En el cuaderno de apuntes solo
anoto: visita de la Sra. Veronka a la escuela y ver a karonka.
Sentía mucha pena al ver los días
como transcurría sin su amiga y a la señora desesperada de no ver a su hija
mayor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario